que deja ver solamente los dientes de arriba. Sin
embargo, hay variaciones. Por ejemplo, si se trata de
una presentación formal, no será necesario mostrar los
dientes, solamente levantar los labios. Al mismo tiempo,
si se trata del encuentro entre dos amantes o cuando
un niño corre alborozado hacia su madre, la boca podrá
estar bastante más abierta, pero sólo se enseñarán los
dientes superiores.
Flora Davis, La comunicación no verbal.
Alianza Editorial, 1983.
Marc Vicens, 2015. |